Si como dice Darío Fo, “El teatro es el diario hablado y dramatizado del pueblo”, debemos admitir que la sociedad contemporánea está regida por el desamor y poblada de seres insatisfechos que todo el tiempo piensan que su felicidad está con otra pareja, en otro tiempo y hasta en un país distinto.
La cartelera teatral se he llenado de obras con una constante: la crisis de pareja.
La cartelera teatral se he llenado de obras con una constante: la crisis de pareja.
Algunas se burlan (Pareja abierta, del propio Darío Fo), otras la llevan al extremo de la tragedia (Closer, de Patrick Marber) y otras la abordan desde el melodrama (Pequeños crímenes conyugales, de Emmanuel Schmitt), pero en todas se refleja una realidad frustrante: después de tantos años, el amor sigue pareciendo una utopía.
Bruno Bichir, actor de Closer, explica que esta crisis “es histórica; desde siempre el hombre y la mujer han tenido necesidades distintas; biológicamente son diferentes, tan sencillo como que en la tlapalería hay tuercas y tornillos, es decir, que uno da y el otro recibe. Y no sólo entre los heterosexuales, en cualquier pareja prevalece la pregunta, ¿y dónde está el amor?”. (seguir leyendo)
Que bellos aquellos tiempos y culturas en los que con una buena dote podías comprar o unirte(mejor dicho) a aquella fémina de tu preferencia. Hay otras culturas que llegaron a extremos que no viene al caso citar, yo mientras tanto deseo comprar a una pequeña vecina que me tiene vuelto loco, oooh aquellos tiempos.
ResponderEliminar(Creo que el amor es un asunto de percepción)
De verdad crees que el desamor y la búsqueda de la felicidad es algo que rige a nuestra sociedad moderna ?, es algo característico de este tiempo ?, o por el contrario es algo inherente al ser humano ?, que tan culpable son los distintos sistemas económicos que nos han gobernado durante la historia de la humanidad de hacernos infelices ?, y nuestro grandioso cristianismo que nos ha mantenido postrados y humillados, con concepciones estúpidas del amor y buscando seres de otro mundo que suplan una necesidad inventada por unos cuantos, que tan culpable es ?, tenia razón el marqués ?,
Oh teatro bendito, sigue mostrándonos lo miserables que somos sin tapujos, solo dinos esa verdad dura... y que duela , que duela mucho, para eso estás.